El cáncer cervical es una enfermedad muy prevenible, esto se debe a que las pruebas de detección son muy efectivas. Es sumamente importante realizar pruebas de salud anuales que incluyan una prueba de Papanicolau para poder bajando el índice mortal del cáncer cervical.
El Papanicolau es un método muy efectivo para encontrar anormalidades en células cervicales y cáncer cervical. En esta prueba, nuestros excelentes ginecólogos tomarán células de tu cerviz para analizarlas.
Nuestros ginecólogos recomiendan que la prueba de Papanicolau se realice cada 2 años a mujeres de entre 21 y 65 años de edad. Para las pacientes que tienen mayor riesgo de contraer cáncer cervical o tienen condiciones medicas subyacentes, es probable que necesiten hacerse la prueba de Papanicolau con más frecuencia.
La prueba de Papanicolau dura solamente unos cuantos minutos y generalmente no genera dolor.
El ginecólogo te indicará que te recuestes en una camilla acostada sobre tu espalda con las rodillas dobladas. Posteriormente, el ginecólogo introducirá en tu vagina gentilmente un instrumento llamado espéculo. Este aparato mantiene las paredes de la vagina abierta para que el ginecólogo pueda ver con facilidad el interior de tu vagina.
El ginecólogo tomará muestras de las células del interior de tu vagina para analizarlas.
No estar en periodo menstrual.
La sangre evita la visualización de las células.
Sin relaciones sexuales por lo menos un día previo al estudio.
Los espermatozoides evitan la correcta visualización.
Sin tratamientos locales como: Cremas, óvulos o lavados vaginales una semana antes.
Los lavados vaginales eliminan células que nos sirven para identificar procesos infecciosos.
Algunas sustancias pueden obstaculizar la visualización de las células.
No usar llevar puesto tampones.
*Ya haber iniciado su vida sexual.
Una de las principales razones por las que se debe realizar el Papanicolaou es para encontrar heridas ocasionadas por el Virus del Papiloma Humano que es transmitido vía sexual.